Luego de la mejora en los futuros en los primeros días de la semana, los precios operan con cautela en la mañana y mayormente en baja. Los fondos especulativos han reducido su exposición en el mercado, realizando compras para achicar su cartera vendida. China se ha mostrado activa en el mercado, comprando sobre Chicago y vendiendo harinas para cerrar márgenes, lo que sumo presión al poroto. Sin embargo, la mejora en los precios podría ser vista como una oportunidad de venta para el productor norteamericano, en un contexto de amplios suministros en EEUU y donde los rendimientos continúan siendo superiores a lo que informa el Usda. La demora en la recolección que se registro en los últimos días rápidamente será olvidada, con tiempo templado y seco que se extenderá hasta fin de mes. Asimismo el Usda destaco ayer que la recolección de soja cubrió el 40 % de la superficie, valor esperado por operadores aunque con un retraso de 13 puntos frente al promedio de los últimos años. En maíz es donde se registra la mayor demora, habiéndose alcanzado el 24 %, 19 %  por detrás del promedio. Por último, vale resaltar que desde el punto de vista técnico nos encontramos en una corrección en la tendencia bajista donde en el corto plazo, 365 u$s en la soja actúa como resistencia, mientras que en maíz el valor a seguir es 150 u$s.

 El trigo ha operado en las últimas ruedas siguiendo el comportamiento de la soja y el maíz, con ausencia de nuevos fundamentos propios del grano. La mejora del cereal ha encarecido el valor de exportación de EEUU frente al de otros orígenes, siendo dicha situación negativa para las perspectivas de ventas al exterior. La siembra en EEUU cubrió el 68 %, en línea al porcentaje de los últimos años, esperándose para fin de mes que se comience a publicar la condición del mismo.

En Brasil la siembra de soja  en el centro y norte se encuentra demorada a raíz la ausencia de precipitaciones. Algunos comentarios indicaban que podría haber replantaciones en aquellas áreas donde ya se había sembrado. De todas formas, la situación no debería ser una preocupación, ya que los pronósticos están anunciando a partir de la próxima semana el inicio de la temporada de lluvias en dicha región. Por otra parte, a nivel local la Bolsa de Cereales de Buenos Aires espera un área de siembra de soja de 20.6 millones de hectáreas, valor levemente superior al año pasado. Los modelos climáticos a largo plazo están anunciando un niño débil a moderado para la toda la primavera y el inicio del verano, fenómeno que podría ser favorable para la producción en nuestro país.